Tras la llegada de los BMW i3 y BMW i8, la gran incógnita están en si veremos un tercer BMW i compartiendo filosofía y planteamiento. El conocido como BMW i5 podría ser una realidad en 2016 aprovechándose de las mejoras y experiencia de BMW con sus dos primeros modelos i, especialmente en lo referente al BMW i3. La firma de Munich siempre se ha mostrado cauta al hablar del futuro de BMW i por la juventud de esta arriesgada apuesta, pero si atendemos a la evolución del mercado, el BMW i5 podría ser un lanzamiento más de los muchos que se avecinan en propulsión alternativa.
BMW i5: supliendo las carencias del BMW i3
Con la fabricación del BMW i3 cubriendo con éxito, y por encima de los objetivos iniciales de la marca, los pedidos de los clientes, la idea de dar vida a un nuevo BMW i abre un nuevo abanico de posibilidades en el futuro de la marca y, especialmente, en la posibilidad de explorar nichos de mercado donde todavía la propulsión eléctrica a baterías no cuenta con representación.
Tesla es el actual referente en lo que a estrategia de producto se refiere. Tras el éxito del Tesla Model S y el próximo lanzamiento del Tesla Model X, la firma californiana pondrá en el mercado una berlina de tamaño compacto denominada Tesla Model E con una autonomía de 300 kilómetros y un precio ajustado para poder hablar de una alternativa real a pie de concesionario.
Aquí es donde siempre se ha ubicado al hipotético BMW i5, pero las últimas informaciones apuntan a que BMW podría haber cambiado los planes de desarrollo del tercer BMW i para construir un nuevo modelo que guarde una estrecha relación con el BMW i3 por planteamiento, pero que albergue mayor habitabilidad interior, cuatro puertas reales y una autonomía mínima por carga de 320 kilómetros.
Amparándose en la actual tendencia SUV que sufre el mercado, descartar el diseño berlina en favor de una carrocería sobreelevada y con rasgos estilísticos muy próximos al BMW i3 parece que podría ser la apuesta ganadora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario